“Los hábitos de la gente exitosa”, será mejor que te vaya sonando familiar, ya que son hábitos y todos podemos adoptar los que queramos. Stephen Covey, dice en su libro Los 7 hábitos de la gente altamente efectiva, que un hábito está compuesto por tres elementos:
Conocimiento: el componente teórico, ¿qué hacer y por qué hacerlo?
Habilidad: el componente práctico, o sea, ¿cómo hacerlo?
Deseo: el componente de motivación, ¿quiero hacerlo?
Varios autores de la materia como Stephen Covey, y Tom Corley (The Daily Succes Habits of Wealthy Individuals) concuerdan en que todas las personas exitosas comparten hábitos en común, y por ello elaboramos esta lista de hábitos, que si aún no tienes, deberías incluir en tu vida diaria:
Levantarse temprano: es muy lógico, las personas exitosas ocupan todas las horas posibles de sus días, saltan de la cama porque tienen objetivos claros de lo que debe hacer ese nuevo día.
Planear tu día una noche antes: de esta forma puedes priorizar tus metas para cada día, y evitar no cumplir con tus objetivos por no tener una lista clara de las cosas que debes hacer. Una agenda sería de mucha utilidad, para tener calendarizado el avance de tus metas, a corto y mediano plazo, que se traduzca en el avance de tus metas a largo plazo.
Ejercitarse: quienes realizan ejercicio, saben que brinda al cuerpo una sensación de calma y felicidad; las hormonas responsables son la serotonina, dopamina y endorfinas, sustancias naturales que combaten el estrés y la depresión. Por ello te sentirás con mayor energía para afrontar todas las actividades y retos que tu día contenga.
Cada día se automotivan con PNL: los pensamientos positivos son proyecciones que entrenan a nuestros cerebros con los pensamientos más frecuentes que tenemos, por ello es conveniente, que todos los días te tomes unos minutos para visualizar a dónde quieres llegar, y que te motives a ti mismo, creyendo en ti, y que lo puedes lograr.
Capacítate, aprende más: sea cual sea tu carrera, profesión u oficio, tienes que mantenerte a la vanguardia, informado y capacitado con las últimas actualizaciones. Tómate unos minutos durante el día, para investigar si hay algo nuevo que debas saber, y comenzar a aplicar. Este hábito te mantendrá por encima de los que no se actualizan en tu mismo ramo.
Alimentarse sanamente: Covey diría, que esto es parte de Afilar la cierra, mantener tu cuerpo saludable y al 100%, te ayudará a desempeñarte mejor en todas tus actividades del día. Comer bien, y a tus horas, es parte de un ritual de amor a nosotros mismos.
No procrastines, sé proactivo: ser productivo requiere mucha concentración, y justo eso te llevará al éxito más rápido en cualquier ámbito. Concéntrate en lo que debes hacer, sin celular a la mano o cualquier cosa que te aleje de tu objetivo principal. No dejes para mañana lo que puedes hacer hoy, e incluso, haz más de lo que te pidieron, ofrece al mundo un plus de tu esfuerzo.
Escucha más, habla menos: al escuchar aprendemos más de los demás, al mismo tiempo que practicamos a ser pacientes, y aprender de los errores ajenos. También es una forma de expresar interés por la otra persona, fortalecer lazos de amistad, y generar relaciones a largo plazo.
Sé positivo, no te pongas limitantes, no te rindas: mantener una actitud positiva es uno de los principales retos, que de lograrlo, te convertirán en una persona exitosa en tu ramo; no pongas límites que no te dejen crecer, olvídate de los pensamientos pesimistas y retrógrados, piensa que puedes, identifica tus áreas de oportunidad, plantea tu meta y un plan a seguir. La gente exitosa no se rinde.
Más libros, menos TV, más : leer cada día mínimo 30 minutos, mantendrá fresco tu cerebro, memoria y agilidad mental; si es posible, olvídate de la programación de TV, mejor ve al cine, o mira contenidos de mayor calidad. La gente de verdad exitosa, no ve la televisión ni una hora al día.
Disfruta lo que haces, sé feliz, y agradecido: los expertos afirman que tienes que sentirte feliz con el trabajo que desempeñas, con tu esfuerzo y resultados, aunque no siempre sean los mejores, porque del fracaso también se aprende. Siéntete agradecido con la vida por todo lo que tienes, aunque suene a motivación popular, pues cada día es una nueva oportunidad de emprender y de hacerlo mejor. Que eso se vea reflejado en tu trato a los demás, y que tu comunicación no verbal sea asertiva.