La innovación en tu empresa

 La innovación pasó de ser una actividad de laboratorio, reservada a expertos, a reconocerse como una red de ecosistemas complejos en continua actividad. Es decir, cuando se trata de colaboración, las organizaciones deben “pensar fuera de la caja”.

Los eventos disruptivos y los cambios abruptos en los mercados están reduciendo la vida útil de las empresas. Se estima que la permanencia promedio de una empresa será de solo 12 años para 2027. La mejor respuesta de las empresas a este desafío es la innovación.

Esto significa no sólo que los directivos y los líderes sean creativos, sino también que promuevan el empoderamiento y que faciliten continuamente la innovación y que infundan creatividad en la cultura laboral.

Para ello deben adherirse a los cuatro principios rectores de la innovación:

1. Estrategia

Los líderes deben comunicar su visión innovadora y espíritu emprendedor a través de palabras y acciones. Esta claridad ayuda a los empleados a desarrollar ideas inteligentes y a ponerlas a prueba, refinarlas y escalarlas rápidamente para que se conviertan en productos y servicios viables. Por otra parte, la inversión en innovación requiere que los directivos analicen con profundidad factores como las demandas de la industria, las condiciones del mercado y la cartera con que cuenta su empresa.

2. Personas

Para cultivar una mentalidad innovadora, los líderes deben alentar a las personas a poner a prueba nuevas ideas, encontrar rápidamente los errores y aprender de ellos; crear procesos que impulsen la innovación y utilizar una estructura que satisfaga las necesidades físicas, temporales y colaborativas. El entorno de la organización debe ser propicio a estas ideas; si sus propuestas no son reconocidas o son rechazadas, los empleados darán marcha atrás en la innovación. Por tanto, es recomendable que los líderes celebren públicamente los esfuerzos de innovación de sus colaboradores y valoren la diversidad de ideas.

3. Procesos

Los líderes deben asegurarse de que, lejos de obstaculizarla, los sistemas organizacionales aceleren la innovación. La comunicación interna debe mantener a los equipos ágiles alineados sobre dónde y cómo enfocar los esfuerzos de innovación, cuándo cambiar y qué hacer cuando surja una gran idea. En algunos casos, esto implica digitalizar y simplificar los procesos; en otros, se trata de identificar mejor las necesidades de los clientes y eliminar los pasos redundantes.

4. Estructura

Los espacios físicos de colaboración también contribuyen a aumentar la innovación. Si cuentan con herramientas verdaderamente colaborativas como rotafolios o paredes de vidrio para anotar las ideas y reflexionar sobre ellas podrán capturar de manera más eficiente lo que de otro modo podría quedar como palabras al viento. Esto implica destinar suficientes horas de trabajo a pensar en la innovación. Si las organizaciones quieren ofrecer más y mejores ideas y soluciones, deben revisar las expectativas de cada rol. Asimismo, nos enfrentamos al gran reto de mantener la flexibilidad en el diseño organizacional, facilitando la adecuación creativa de procesos a las circunstancias que el entorno va dictando.

FUENTE: Mauricio Reynoso. (2021). 4 principios básicos para reactivar la innovación en tu empresa. 12/Noviembre/2021, de El economista Sitio web: https://www.eleconomista.com.mx/capitalhumano/4-principios-basicos-para-reactivar-la-innovacion-en-tu-empresa-20211107-0031.html